viernes, 12 de abril de 2013

Cuidados de un bonsai


Cuidados y estilos de bonsai


*INTRODUCCION:

El bonsai, es un árbol en una maceta reducida.Proviene del Japón (bon es maceta y sai árbol), aunque fue en China donde se tiene constancia ,de que allí ,lo usaban los grandes señores ,para llevar las plantas aromáticas y medicinales , en grandes vasijas . 

Ahora ,hace pocos años ,que conocemos a los bonsais ,como producto elaborado japonés. 

Ellos han puesto una serie de normas y forma de presentación ,pero nosotros los occidentales lo hemos de aceptar que no tenemos el pensamiento oriental ,sino el aceptar unas reglas que nos viene de la naturaleza,pero no obstante debemos realizar un trabajo parecido al de ellos,por ejemplo algunos estilos y técnicas que tantos resultados les da. 
A mí personalmente me va bien el que debemos imitar el árbol , tal como lo vemos en la naturaleza ,respetando el estilo que nos proporcionan , pero sin alterar la estética.

*UNA HISTORIA QUE CONTAR:

Los orígenes del bonsai se pierden en el tiempo, pero es probable que su cultivo se iniciara en China hace más de mil años, como consecuencia del taoísmo. Los seguidores de esta religión creían que los fenómenos naturales, como por ejemplo las montañas, los árboles y las piedras, estaban cargados de poderes, y que los ejemplares diminutos los poseían de forma concentrada. También pensaban que una forma retorcida y nudosa representaba los cuerpos de los que habitaban el mundo de los espíritus, en el cual habrían alcanzado una edad avanzada. 


*Cuidados generales de un bonsai

Al igual que todas las plantas vivas, un bonsai no sobrevivirá si no tiene agua. La frecuencia del riego depende de muchos factores, especialmente del estado de crecimiento de la planta, y del clima. 

En invierno, los bonsais que viven al aire libre necesitarán poca agua, aparte de la que reciben en forma de lluvia. Los árboles de interior requieren cierto control, ya que la humedad del suelo se evapora a pesar de que el bonsai no crezca nada o casi nada. 

La primavera es una época peligrosa. Como comienzan a crecer las hojas y los vástagos, las necesidades de agua del bonsai aumentan muchísimo, y esto suele coincidir con un cambio de clima, que pasa de húmedo y frío a ventoso y seco. Hay que regar los bonsais en cuanto han consumido la mayor parte (no la totalidad) del agua que tienen en el recipiente. 

Al llegar el verano, el tiempo, con suerte, será muy cálido, tal vez con brisa y un sol fuerte. En estas condiciones, los bonsais requieren un riego abundante una vez al día, preferiblemente por la mañana temprano o al Analizar la tarde y, en casos excepcionales, en ambas ocasiones. Los bonsais de interior también necesitan más agua y, por lo tanto, habrá que controlarlos todos los días. 

En otoño, los árboles inician los cambios químicos que producen la caída de las hojas y el estado de latencia. Disminuye la necesidad de agua y hay que tener cuidado de no regarlos en exceso en esta época, ya que, con las temperaturas más bajas, especialmente por la noche, se corre el riesgo de que se pudran las raíces. 

*CONSERVACIÓN Y CUIDADOS:

Guía : Poda, Trasplante, Mezclas de tierra
Cuidados al año , Enfermedades , Plantas adecuadas

Una vez que tenga varios árboles jóvenes y sanos creciendo en tiestos, habrá llegado la hora de comenzar a pensar en la preparación necesaria para controlar y desarrollar la forma del futuro bonsai. A los novatos los pone nerviosos pensar en la poda, porque creen que van a lastimar los árboles, cuando en realidad se trata de una parte esencial del proceso para mantener los bonsais sanos, vigorosos y frondosos. 

Poda y pinzados 

Para podar correctamente un árbol es importante que comprendamos sus hábitos de crecimiento. Entre los árboles caducos, hay algunos que producen vástagos y hojas nuevas durante toda la época de crecimiento. Este grupo incluye el arce, el espino, el carpe, el olmo, el durillo, el alerce, la secoya y el ciprés de los pantanos, así como también el cedro japonés siempreverde, los delicados cítricos y el granado. 

Cuando la hojas de estos árboles se abren en la primavera, aparecen vástagos en las puntitas de las ramas y en las yemas situadas a los lados de estas. 

Para consevar el tamaño, hay que eliminar los vástagos cuando se alargan, dejando apenas una o dos hojas en la base. Sin embargo, para estimular el crecimiento en una sola dirección, se debe cortar el vástago justo por encima de una hoja que crezca en el sentido que se desea el crecimiento futuro. Un nuevo vástago crecerá a partir de la yema latente situada en la base de la hoja en la dirección requerida. 

La mayor parte de estos cortes, que se realizan durante la época de crecimiento, se pueden hacer con el índice y el pulgar, aunque a veces es necesario el uso de tijeras. No hay que podar de este modo los árboles que no sean sanos. En realidad, es improbable que sea necesario podarlos, dado lo poco que crecen. 

Hay que eliminar las ramas que no se desean: las que están muy abajo, o situadas justamente enfrente de alguna en buena posición (línea gruesa). Las partes más nuevas tienen que recortarse (línea punteada) para estimular una mayor ramificación. 

*Trasplante

El trasplante es necesario para todas las plantas en maceta y, en particular, para las plantas jóvenes. Consiste en cambiar la maceta o, simplemente, la tierra. 

¿Por qué trasplantar ?

- Un volumen pequeño de tierra no permite a la planta vivir indefinidamente. Pasado un tiempo, la tierra pierde sus elementos nutritivos, el humus desaparece, la composición del suelo cambia y ya no fija las partículas minerales. 

- Las raíces se desarrollan demasiado y terminan por ocupar más de la mitad de la maceta. A menudo, su fuerza y volumen desplazan a la planta hacia afuera. 

Cuándo trasplantar Si se dispone de un invernadero fresco, resguardado de las heladas, se puede trasplantar durante todo el invierno, ya que el sistema radicular no requiere reposo invernal, especialmente si son árboles de hoja caduca. 

Un viejo refrán dice incluso que «En el día de Santa Catalina (el 25 de noviembre) todo árbol echa raíz». Sin embargo, dado que las raíces en maceta son muy sensibles al frío, hay que asegurarse de que el suelo no se hiela. 

El mejor, y a veces único, período posible es el mes de marzo, apenas terminado el invierno. Una parte de las raíces que forman el cepellón habrá perecido naturalmente durante la estación fría. La planta estará todavía en reposo, pero el desenredado de las raíces será más fácil y la cicatrización de los cortes más rápida. 

Cómo trasplantar El trasplante consiste en cambiar la tierra, suprimir una parte de las raíces y, según el caso, cambiar de maceta. Para realizarlo se seguirán los siguientes pasos: 

- Retirar la planta de la maceta y verificar el estado de sus raíces. 

- Preparar la maceta (la misma si no vamos a cambiarla), obturando los agujeros con tela o tu¡ de plástico, fijándolos, si es necesario, con alambre de cobre. 

- Esparcir en el fondo una capa de arena gruesa, destinada a drenar el exceso de agua. 

- Deshacer el paquete de raíces, peinándolo con un tenedor, tratando de lastimar lo menos posible las raíces grandes. Una vez que estén bien peinadas, suprimir entre un tercio y la mitad de las raicillas con unas tijeras. Eliminar la tierra vieja. 

- Poner un poco de tierra en el fondo de la maceta y colocar el bonsai. Si éste tiene gran volumen y el tiesto es muy poco profundo, será indispensable amarrar la planta, pasando las dos extremidades de un alambre de cobre por el agujero de drenaje y fijando con ellas el cepellón. 

- Agregar tierra nueva alrededor de¡ cepellón y comprimir firmemente, primero con los dedos y después con la alcayata. 

- Ya se haya conservado el musgo encima de¡ cepellón, o previamente retirado, volver a ponerlo sobre la superficie de la maceta. - Regar en abundancia pero suavemente, con una regadera de agujeros finos. Si procede, sumergir la maceta en una palangana con agua por debajo de¡ nivel de la tierra, hasta que esté bien empapada. 

- Luego, dejar escurrir y poner el bonsai a la sombra durante varias semanas, hasta que el sistema radicular se haya formado otra vez. Es muy importante no abonar la tierra durante este período.

¿Con qué frecuencia trasplantamos?

En general, puede decirse que los árboles de follaje perenne tienen necesidad de trasplantes menos frecuentes que los de hoja caduca, que producen más materia orgánica y renuevan su follaje más a menudo. Un pino tendrá menos necesidad de ser trasplantado que una secuoya primitiva o un arce.

*Plantas adecuadas para el cultivo del Bonsai

Para terminar, citaremos algunas de las plantas aptas para bonsais, entre las más frecuentes en nuestro país, y las mejor adaptadas a nuestro clima. 

Abies SP (abeto) 

Conífera de hoja perenne. Algunos árboles pueden alcanzar los sesenta y cinco metros. Ramas casi horizontales y desde el suelo. Reproducción: por semilla, en abril-mayo. También por esqueje. Poda: en primavera. Alamabrado: todo el año. Estilos: Choka.n, Yose Uyé. 

Acerpalmatum (arce) 

Arbolillo de hoja caduca que requiere suelos ácidos. Hoja: caduca, palmeada, de cinco a nueve lóbulos, dentada y muy recortada. Reproducción: por esqueje. Poda: en primavera. Alambrado: de primavera a otoño. Estilos: I kengai, Han Ikengai, Yose Uyé, Chokkan, Moyogi. 

Alnusglutionosa (chopo) 

En la naturaleza alcanza, y llega a rebasar, los veinte metros de altura. Hoja: redondeada, con los bordes dentados con nervaduras paralelas. Reproducción: por sen-iiflas, trasplantes y acodos. Poda: en invierno. Alambrado: exclusivamente en invierno, por medio de la poda. Suelo: universal. Estilos: sin forma, vertical; a partir del mismo tronco; árboles en grupo. 

Buxus sempervirens (boj) 

Arbusto que puede alcanzar los cinco metros. Hoja: perenne, de pequeño tamaño, follaje denso. Reproducción: por esqueje, en septiembre y marzo. Poda: en primavera. Alambrado: todo el año. Estilos: Ishizuki, Han I@engai, Yose Uyé, Chokkan Moyogi. 

Castanea sativa (castaño) 



*ESTILOS:

La primera regla es muy simple: la forma del bonsai está determinada por el carácter y temperamento de su dueño, que trabaja la planta de acuerdo con su gusto, su naturaleza y su sensibilidad. No es un arte que aspire a obtener a cualquier precio el canon del bonsai perfecto. Si bien conviene respetar ciertas indicaciones y seguir una determinada tendencia para que el carácter de nuestro árbol se afirme, hay que tener claro que no existen dos bonsais idénticos y que lo más importante es el amor que le hemos consagrado, más allá de sus aparentes imperfecciones. 

*Estilos principales:

Se conocen como mínimo cinco estilos básicos de bonsai:el formal vertical, informal vertical, inclinando , de media cascada y cascada. Y ahora procuraré explicar los principios básicos de cada estilo: 

Cascada Vertical Informal, Vertical Formal Estilo Inclinado Media Cascada 
Vertical Formal...

Vertical formal (Chokkan) 

Son muy escasos, posiblemente por la falta de material adecuado para comenzar su cultivo. Los interesados no deben echarse atrás por este motivo, ya que pueden cultivar las especies Pinus o Cryptometia con este fin. 

Los árboles Chokkan presentan un tronco vertical, recto y ahusado, del que salen las ramas en una progresión regular. 

Las ramas inferiores están más espaciadas y, a medida que nos acercamos a la copa, las ramas se van volviendo cada vez más cortas y menos espaciadas. Lo ideal es que las ramas crezcan paralelas al suelo, y que las inferiores sean más gruesas que las superiores. 

Las especies que se preparan según este estilo suelen ser peren-nes, y las más frecuentes de ellas Mnus thunbergii, Juniperus rígida y Cryptometia japonica. 

Vertical Informal...

Vertical informa¡ (Moyogi) 

Este estilo abarca una gran variedad de tipos, desde los árboles con formas naturales, tal como crecen en el campo, hasta las formas de pinos más estilizadas, de troncos curvados. Es probable que existan más bonsais dentro de esta categoría que en todas las demás, ya que resulta adecuada para cualquier especie de árbol. 

Estilo inclinado...

Inclinado (Shakan) 

No se trata de un árbol demasiado grande plantado en ángulo para reducir su altura -fallo éste que se aprecia con frecuenciasino de un bonsai perfectamente equilibrado, que bien podría crecer sobre un arroyo o un sitio similar. 

La Especie recomendada : La mayoría de la especies son adecuadas para este estilo, cuando el estilo soporta la similtud a informal vertical. El trabajo de Conifers particularmente bien. 

En Cascada...

Cascada (Kengai) 


En este bonsai, el o los troncos parecen caer por encima de un lado del tiesto, el cual debe ser profundo para proporcionar un equilibrio visual. Como el tronco puede descender bastante más que la profundidad del recipiente, estos bonsais suelen colocarse sobre un pedestal elevado. Existen muy pocos en Europa, a causa de los problemas que representa el sitio donde deben guardarse cada día, pero la mayoría de las especies pueden prepararse de esta manera. En Japón, la mayoría de los bonsais Kengai suelen ser perennes. 

Media Cascada 

Media cascada (Han Kengai) 



Los troncos de estos elegantes bonsais descienden por debajo del borde del tiesto, aunque sin llegar a la base de este, cuya profundidad oscila entra la de un tiesto normal y la de uno en cascada. Este estilo se ve con más frecuencia que el de cascada, y existe una amplia gama de variedades adecuadas.

*Videos de cuidados de los bonsais:


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